Ingeniera de Minera El Abra recibe el premio “Mujer destacada en Minería 2021”
Esta profesional, actualmente Jefa General de Mantención, ha logrado obtener cargos que principalmente eran ocupados por hombres y ha trabajado por buscar las instancias para fomentar la incorporación femenina en la empresa
María Eugenia Morales, Ingeniera Civil Industrial que hace 14 años trabaja en Minera El Abra, filial de Freeport-McMoRan, recibió el galardón “Mujer Destacada en Minería 2021”, reconocimiento que fue entregado por el Subsecretario del Ministerio de Minería junto a la Subsecretaria del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género.
Esta distinción reconoce la experiencia y trayectoria de la trabajadora en las funciones que ha desempeñado en faena y destaca el rol activo que ha tenido en incorporar el talento femenino en diversos cargos tradicionalmente ocupados por hombres.
“Nos sentimos muy orgullosos de que una trabajadora de El Abra haya alcanzado esta importante distinción que resalta su gran desarrollo profesional, pero además su aporte y la visión de la compañía, para que más mujeres sean parte de esta industria”, recalcó Rubén Funes, presidente de Minera El Abra.
La subsecretaria del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género María José Abud señaló que: “Como ministerio estamos contentos de este premio porque creemos importante relevar buenas prácticas de la industria y mostrar mujeres que están haciendo cambios, que están haciendo historia. Sin duda todo este trabajo marca un antes y un después en la industria, tomar el tema avanzar y trabajar en una hoja de ruta”
El subsecretario de minería Edgar Blanco por su parte recalcó que “las oportunidades están, las empresas están ansiosas de formar mujeres para que trabajen en minería, pero nos falta que nuestras jóvenes se crean el cuento, que vean que es posible hacerlo. Que, si lo hizo María Eugenia cuando entró a la industria como ingeniero trainee, que enfrentó muchos más desafíos y fue mucho más complejo de lo que puede ser entrar hoy día, hoy estamos más acostumbrados”.
En 2007, a los 26 años, María Eugenia comenzó su carrera en El Abra como reemplazo de asistente de gerencia y luego postuló como Ingeniero Trainee, programa que busca reclutar profesionales recién titulados dándoles experiencia en una faena minera. Desde abril de este año es Jefa General de Mantención Línea Amarilla, encargada de la mantención de distintos tipos de camiones de extracción.
“Me apasiona mucho mi trabajo y creo que este premio es parte de eso, de la oportunidad que me han dado las distintas personas y mentores que he tenido en mi camino y es un premio al esfuerzo, a la constancia, al profesionalismo, a ir aprendiendo e ir tomando las oportunidades que se van presentando y hacer bien el trabajo”, dice María Eugenia.
Añade que “en El Abra y Freeport tenemos una cultura de hacer las cosas bien y este premio es para seguir apuntando alto, teniendo metas, ser un aporte dentro de la organización y también un factor de cambio. Creo que, así como yo he ido trabajando en El Abra, muchas otras compañeras lo pueden ir haciendo y logrando sus sueños”.
Un tema central de su trabajo ha sido fomentar la incorporación de mujeres a la industria. Se ha preocupado de la infraestructura e indumentaria para que las mujeres puedan realizar su trabajo de manera óptima, por ejemplo, colaborando en la habilitación de una sala de cambio para las técnicas del área de mantenimiento y apoyando la selección de vestimenta adecuada para mujeres con turnos de noche.
“Me ha tocado siempre ir abriendo espacios, haciendo de a poca presencia femenina en el rubro minero, donde antes no había muchas mujeres, ni se interesaban tampoco. Creo que he tenido un rol importante porque ha permitido que mis pares, mis compañeros, mi jefatura vean y crean que las mujeres podemos hacer el trabajo junto con ellos, igual que ellos y aportando una mirada distinta”, señala María Eugenia.
Una anécdota que la premiada recuerda fue cuando trabajaba como Planificadora de palas de largo plazo. “Los que ocupaban ese cargo, mayormente hombres, se quedaban en su oficina y planificaban con su computador y su teléfono, mientras el desarme de las palas se hacía en un patio”, señaló. “Armé mi oficina en un container al lado del proceso en terreno. Ahí tuve el contacto con los técnicos, los mantenedores y líderes del proyecto. Pude ser partícipe, liderar y aprender”, señaló. Hoy, los planificadores en esa área hacen lo mismo, y van con su oficina a instalarse al lado de la faena.